PRAGMATISMO
Es conveniente y sano sobrevolar los acontecimientos, situarnos en diferentes opciones, otear en el horizonte soluciones que podemos aplicar al día a día. Pero, una vez que tengamos la decisión tomada, pongamos pie en tierra y apliquemos aquello que sea más real. Dejemos en la alacena de nuestro cerebro aquello que no resuelva la situación que queremos y deseamos resolver. Vayamos al encuentro de nuestra decisión, ligeros de equipaje, con la mente fría y el esfuerzo constante. Sobre todo, creamos en nosotros mismos, tengamos fe en nuestra decisión. Somos libres en nuestra toma de decisiones, ejercitémosla; es nuestro gran triunfo, ser responsables de nuestros actos y decisiones. A nadie le compete enjuiciarlas, sino a nosotros mismos. Es el triunfo de la LIBERTAD. Hay que pasar de la meta soñada a la realidad cotidiana, a la meta que nos permite nuestro conocimiento y tenacidad en conseguirla. En esta situación, hay que ser bastante pragmáticos. Si tenemos viento a favor y la vela de