Te toco y es una sombra la que se enreda en mis manos, como si yo no estuviera formado para este mundo. Si, te escucho, no, te entiendo, como si no fuera este lugar de mi existencia. Viéndote, no sé quién eres: Temo soñar esta vida. Que esta vida me sueñe.
Filosofía.Poesia.Opinión.Humor